El idioma francés es una de las lenguas que más crece cada año. Se expande tanto en territorios como en hablantes, y cada día más personas deciden aprenderlo para mejorar sus capacidades. Actualmente, casi la mitad de los francófonos viven en África, debido a la colonización del continente por diferentes imperios, pero ahora veremos un poco de historia.

Si tú quieres aprender francés y te interesa toda la cultura que rodea a los diferentes países, ponte en contacto con nosotros. Te asesoraremos y te descubriremos lugares increíbles donde empezar tu formación, ya sea en tu país de origen o directamente en el centro de la acción.

Breve historia del idioma francés

Como ocurre con el castellano, el italiano, el portugués o incluso el rumano; el origen del francés es el latín conocido como vulgar o tardío. Estas lenguas romances fueron evoluciones del idioma de a pie de los diferentes territorios romanos, con diferentes dialectos locales que se transformaron en lenguas romances.

Los territorios del norte de Francia fueron la cuna del francés antiguo, que se convirtió en idioma oficial del (por entonces) reino en el año 1539. Poco después, en el siglo XVII, empezó a considerarse una lengua de culto, reservada para los instruidos, los diplomáticos y la nobleza.

Luego fue el colonialismo francés el que se encargó de expandir el idioma. La mayoría de colonias francesas en América (como Quebec) estuvieron bajo mando hasta finales del siglo XVIII o principios del XIX. En África, por el contrario, se comenzó más tarde la conquista y, hasta 1960, Francia tenía gran influencia en el continente.

A día de hoy, esto ha significado que muchos países del mundo tengan el francés como idioma oficial o cooficial. Además, es uno de los idiomas de trabajo en las Naciones Unidas o una de las lenguas de procedimiento de la Unión Europea.

¿Dónde se habla francés?

29 países tienen el francés como parte de su cultura, ya sea como lengua oficial o compartida con otras. En orden alfabético, serían: Bélgica, Benín, Brazzaville, Burkina Faso, Burundi, Camerún, Canadá, Chad, Comoras, Costa de Marfil, Francia, Gabón, Guinea-Conakri, Guinea Ecuatorial, Haití, Luxemburgo, Madagascar, Malí, Mónaco, Níger, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Ruanda, Senegal, Seychelles, Suiza, Togo, Vanuatu e Yibuti.

Esto comprende un total de más de 300 millones de francófonos, que incluye unos 220 millones de nativos y unos 80 millones de semihablantes de francés. Debemos tener en cuenta que gran parte de esta población se encuentra en países africanos, donde el crecimiento de sus habitantes es muy alto. Por lo tanto, se estima que en veinte años podría haber más de 500 millones de francófonos en el mundo.

De los países antes mencionados, el mejor lugar para aprender francés es la propia Francia, no hay duda. Pero siempre puedes optar por cualquiera de las otras experiencias que te llenen a la vez que descubres un idioma nuevo o mejoras lo que conoces. Solo tienes que proponértelo y pasar una temporada en tu destino favorito.

En Europa puedes viajar a Bélgica, Luxemburgo, Mónaco o Suiza y tendrás un gran acceso al idioma francés. En América, el principal país es Canadá, pero también en Sudamérica encontrarás algunos. Y en África hay una gran parte de lugares donde se ha establecido como idioma oficial o cooficial, aunque con variantes propias por el contacto con las lenguas nativas.

Ahora que ya sabes de la importancia del francés en el mundo (y lo que llegará en el futuro), es hora de ponerse manos a la obra. Busca la mejor manera de aprender en tu destino favorito y aprende el idioma del amor y uno de los más valorados del planeta.